Proteger el bolsillo de la people de comerciantes mal intencionados es uno de los objetivos de los chamacos de la Defensoría del Consumidor, ya que buscan que los salvadoreños tengan productos de calidad, que obtengan mercancía acorde a lo que han pagado y que no se la timen con precios altos que estén fuera de la Ley.
Para proteger los derechos de los consumidores y entregarles las herramientas necesarias a los chamacones de la Defensoría del Consumidor, los cipotes de la Asamblea Legislativa aprobaron alrededor de 50 reformas a la Ley de Protección al Consumidor con el fin de homologarla con la Ley de Procedimientos Administrativos.
“Felicito al titular de la Defensoría del Consumidor, Ricardo Salazar, porque en tres años de gestión se han recuperado $57.2 millones a favor de los consumidores, equivalentes al 54% de los beneficiados desde que inició la institución en 2005”, dijo el diputado de Nuevas Ideas, Rodrigo Ayala.
Con estas reformas, se dinamizará la economía y se mejorarán las prácticas de los consumidores y los proveedores.