Los cipotes del Viceministerio de Transporte se fueron esta madrugada a cazar bolos en la zona occidental del terruño
En un control antidoping le pusieron las heladas a un motorolo que andaba boliche con 200 mg/dl de alcohol en aire espirado.
Otro conductor peligroso fue sacado de las calles porque cuando se le hizo el alcotest, resultó con 182 mg/dl de alcohol.
Con estos dos bolos fuera de las calles, la people que maneja en sus cinco sentidos, puede sentirse tranquila de que no corre riesgo de tener algún accidente por culpa de los motorolos que combinan irresponsablemente el alcohol con el volante.