La economía de Corea del Sur está a punto de irse a la borda por la infidelidad del primogénito del presidente del Grupo Sunkyung, Chey Tae-won, con su media naranja, hija del presidente de ese país, Roh Soh-yeong.
La pareja se casó en 1998 y todo parecía caminar sobre ruedas hasta que Chey Tae-won confesó andar de coscolino con una amante, con quien habría tenido un hijo.
Desde ahí, comenzó el proceso de divorcio que ha hecho tambalearse la economía de un país controlado por los chaebol, un conglomerado dirigido por poderosas familias.
La repartición de bienes de ambos podría tener consecuencias dramáticas para SK Gruop, en caso de que sus acciones queden divididas.