Un joven se hizo pasar por un maniquí para robar en un centro comercial de Varsovia, Polonia, en una actuación que ya había realizado anteriormente.
Esta vez fue captado por las cámaras de seguridad, lo que permitió que pronto llegaran los agentes policiales para darle captura.
El robo lo cometió cuando el establecimiento cerró, informaron medios locales que le dieron seguimiento al caso hasta que se comprobó que cometió el delito.
Por haber cometido esta irregularidad, a ley de ese país establece una pena de prisión de hasta 10 años de cárcel.
“Para ello, con una bolsa en la mano, se quedó quieto delante de un escaparate, fingiendo ser un maniquí. Sintiéndose seguro, se fue a ‘cazar’ y robó un puesto de joyería, comentó Robert Szumiayta, portavoz de la policía de Varsovia