Los meros macizos encargados de la seguridad en Nueva York aplaudieron la Guerra contra las Pandillas que libran las autoridades salvadoreñas y la reducción de la actividad criminal de la MS en ese estado de Estados Unidos.
En un informe de Newsday, compartido por el presidente Nayib Bukele, los funcionarios neoyorquinos reconocieron que la “disminución de la comunicación desde El Salvador ha permitido que los capítulos de Long Island se vuelvan más independientes y ‘americanizados’ en los últimos años”.
El subsheriff del Condado de Suffolk, Kevin Catalina, viajó recientemente a El Salvador para reunirse con los encargados de la seguridad en el país y visitaron el Centro para el Confinamiento del Terrorismo (CECOT), donde cumplen sus penas los criminales que causaron terror en la población salvadoreña.
Catalina junto otros funcionarios de seguridad admitieron que las medidas enérgicas contra Long Island y la guerra contra las pandillas en El Salvador, pese a las críticas de los ‘defensores de derechos humanos’ y el Departamento de Estado de Estados Unidos, ha dañado el liderazgo e interrumpido el accionar de la MS-13.