Este miércoles los rojitos del FMLN recibieron otro golpe bajo, porque de los pocos alcaldes que le quedan, uno más renunció, el cipotón Ángel Rubén Benítez Andrade, jefazo de la alcaldía de El Divisadero, en Morazán.
En la carta dirigida al peloncito de Óscar Ortiz, el alcalde le dice que, aunque «abrazó» la bandera del FMLN porque compartía los ideales, la majada de su pueblo ya se decepcionó al ver que no cumplieron con las promesas en los dos gobiernos.
En vista de esto, el jefazo de la comuna no pudo traicionar a su gente y decidió abandonar las filas del partido que los dejó en el olvido.
El macizo de El Divisadero ha sido electo por la mapachada del pueblo por 8 períodos consecutivos, es decir que lleva 24 años al frente de la comuna, a la que el Frente nunca dio sostén.
A pesar de su renuncia, Benítez se comprometió a seguir trabajando como el primer día, por el bienestar de su pueblo que, por tantos años le ha dado su apoyo.