La emergencia medioambiental declarada por el Ministerio de Medio Ambiente en la zona del lago de Coatepeque ha desencadenado una serie de medidas enérgicas para combatir la proliferación de cianobacterias y abordar la contaminación en el área.
El presidente de la Autoridad Salvadoreña del Agua (ASA), Jorge Castaneda, anunció la próxima instalación de una avanzada tecnología de boyas ultrasónicas en el lago. Estas boyas, que emiten ultrasonidos para controlar las cianobacterias, representan una solución innovadora que no requiere el uso de productos químicos, asegurando la seguridad del ecosistema acuático.
Además de estas medidas tecnológicas, se están realizando inspecciones exhaustivas en las residencias y establecimientos comerciales cercanos al lago para garantizar un manejo adecuado de las aguas residuales. El gobierno ha adoptado una postura de «cero tolerancia» hacia la contaminación del agua, con sanciones potenciales de hasta 10 mil salarios mínimos para quienes infrinjan estas regulaciones.
Con más de 800 inspecciones ya llevadas a cabo desde el inicio de la emergencia, las autoridades están comprometidas a restaurar y proteger el preciado recurso hídrico del lago de Coatepeque.