Anoche, los aficionados a la música sacra fueron transportados a un reino celestial mientras el Coro Nacional de El Salvador encantaba a la audiencia con una selección de 11 hermosas melodías en el Concierto de Música Sacra, celebrado en la majestuosa Basílica Nuestra Señora de Guadalupe.
Las voces del elenco nacional, imbuidas de devoción y fervor, guiaron a los presentes a través de los siglos de música sacra. Cada composición, desde el venerable «Ave verum corpus» de William Byrd hasta la jubilosa pieza del «Salmo 150» de Ernani Aguiar, invitó a la reflexión y a la contemplación de la espiritualidad.
El público se deleitó con la destreza y la emotividad con la que el Coro Nacional interpretó cada pieza, haciendo eco de la profunda reverencia por la música sacra. El ambiente en la Basílica se llenó de una atmósfera de paz y serenidad, elevando los corazones y las mentes de todos los presentes hacia lo divino.
El Concierto de Música Sacra no solo fue un evento de entretenimiento, sino también una experiencia trascendental que dejó una impresión perdurable en los corazones de aquellos que tuvieron el privilegio de presenciarlo.