El bro David López se está haciendo famoso cada día, pero no por figurar en las redes sociales sino por disfrazarse de ninja para hacer unos ricos platillos.
El negocio se encuentra en el kilómetro 32, de la carretera Panamericana, en la tierra de los chorizos.
Es un cocinero peculiar, cuyo negocio llama la atención porque el man elabora unos manjares típicos al más estilo de antaño: comida fabricada en cocina de barro.
“Los ninjas son sigilosos, el color rojo es por el fuego, el café para la leña y el negro está en el carbón. El traje y el color identifica la llama del fuego”, responde sobre el por qué combina su traje y la comida.
El “ninja” siempre busca sorprender con la comida aunque nunca dejará de lado los “frijolitos frescos y el chorizito”.
Llegando al kilometro 32 de la carretera Panamericana siempre los comensales identificarán el negocio porque está a la orilla de la calle y por la columna de humo que emana del comedor.