Los cipotones integrantes del Equipo de Búsqueda y Rescate Urbano (USAR) y el chuchito rescatista, Rambo, compartieron su experiencia sobre la ayuda humanitaria, que llegó a Turquía en el momento más difícil.
El macizo de Fernando Portillo, que pertenece al Cuerpo de Bomberos, explicó que este gesto por parte del mero presi Nayib Bukele y la majada salvadoreña, queda en la historia y en los corazones del pueblo turco.
La preparación de estos macizos permite responder de manera oportuna ante cualquier emergencia, especialmente en el terruño que es propenso a “un puño” de sismos.