Salieron por unas heladas, pero terminaron la parranda con otras heladas… en sus muñecas. Un Total de 26 bolígrafos fueron metidos al bote tras el cerco antidoping de la noche del viernes y madrugada del sábado, implementado por los macizos del Viceministerio de Transporte y la Poli.
Los maitros manejaban bien cabezones y en cámara lenta cuando los pararon en seco en diferentes controles antidopaje que les prepararon las autoridades para que no se pasen de vivos conduciendo bien a puchinga.
En los retenes fueron detenidos desde un cipote de 18 años hasta varios maitros de 37. Estos cheros se la llevan de ladrillos secos, pero algunos ya andaban hablando en lenguas y con más de 100 mg/dl, de acuerdo con los macizos de Obras Públicas y Transporte.
Nelson Reyes, el mero mero de Transporte, dijo que en lo que va de 2023, hasta el cierre del viernes, son 1200 bolígrafos detenidos por manejar bajo el efecto de las aguas espirituosas y que las autoridades van a seguir socando la pita a los temerarios con más cercos antidoping.
«Este cerco es un mensaje a la población que vamos a tener cero tolerancia con estas personas. Vamos a intensificar los cercos. También vamos a intensificar los controles por uso de celular y abuso de velocidad«, afirmó el macizo