Los cipotones del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales tuvieron el privilegio de wachar el nacimiento de un grupo de cocodrilitos en uno de sus viveros.
Los huevitos pasaron más de 70 días en incubación, enterrados y siendo monitoreados por el equipo técnico y de guardarrecursos. Algunos de los cocodrilitos tuvieron que ser más monitoreados que otros, pues la doble membrana que envuelve el cascarón es muy resistente y no la podían romper solitos.
Los animalitos fueron marcados y medidos para tener un mejor estimado de la población y conocer el rango de distribución de la especie. Así cuando se realizan los monitoreos, si se encuentra uno se sabe de dónde vienen, y hasta su edad.