Un perrito sin hogar se convirtió en el protagonista de un centro comercial local después de ser visto jugando en una piscina de pelotas tras una intensa lluvia en la capital.
Los clientes se detuvieron para disfrutar del espectáculo mientras el intrépido canino exploraba las instalaciones del establecimiento en busca de diversión y refugio.
Aunque su estadía fue breve, su espíritu juguetón dejó una huella de alegría en el lugar.