Gran relajo se ha armado en México, después de que la diputada trans, del partido de izquierda MORENA, María Clemente García, dijera a la prensa que ella siempre ha trabajado haciendo pornografía, y que no lo dejará de hacer; pues su oficio es «ser puta», y tiene derecho a serlo, dijo.
Y el escándalo empezó porque la controversial diputada había publicado días antes un video subidito de tono, en su cuenta de Twitter, donde se le ve practicando sexo oral a un cliente; por lo que varios congresistas mexicanos exigieron la renuncia de la maitra María Clemente.
Esta diputada de izquierda ha declarado que, antes de ser diputada, ella se dedicaba a la prostitución, y que no ha dejado de hacerlo, para poder ganar un poco de dinero extra; así como se lo ganan otros diputados que son administradores o abogados, y que siguen ejerciendo su profesión, exclamó la congresista azteca ante la prensa.