Los clubes saudíes están invadiendo el mercado del futbol con la compra de jugadores estrellas, futuros cracks y algunos buenos que están a punto de retirarse.
Es el boom del momento en medio de la pasiva mirada de los clubes europeos que se quedan viendo como sus mejores futbolistas se les escapa de la mano.
Al Real Madrid les compraron Benzema, al Chelsea el defensor Koulibaly, al Bayer, Sadio Mané, mientras el Liverpool está con los nervios de punta porque su delantero estrella Salah podría recalar en algún club de la Liga de Arabia Saudí.
Quien abrió el mercado fue el portugués Cristiano Ronaldo, y después se fueron sumando otras estrellas de uno y otro club del continente europeo.
El último en llegar ha sido el brasileño Neymar, que con una edad promedio todavía le restaban años para continuar en el fútbol élite.
Sin embargo, el presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, ha sido contundente con sus declaraciones: “Solo los clubes europeos pueden jugar la Champions, Europa League o Conferencia”.